jueves, 5 de noviembre de 2009

A los 84 años, falleció Félix Luna, el gran difusor de la historia argentina






















El historiador Félix Luna falleció este jueves a los 84 años, luego de padecer una dura enfermedad que lo mantuvo postrado el último mes. Aunque estaba formado como abogado en la Universidad Buenos Aires (UBA), Luna fue el primer difusor mediático de la historia en la Argentina.

El intelectual se encontraba internado en los últimos días, hecho que le impidió participar de un homenaje a su persona realizado el lunes pasado en la Legislatura porteña, donde una de sus hijas recibió, en su nombre, el Premio a la Trayectoria de la Academia del Folklore de la República Argentina.

Desde esa institución, presidida por Antonio Rodríguez Villar, informaron que el cuerpo será velado este jueves entre las 17 y las 23 en el edificio de O´Higgins 2842, del barrio de Belgrano.

"Es una dolorosísima pérdida para la cultura y en especial para el folklore de nuestro país. Félix Luna, a quien me unía una fraterna amistad de más de 50 años, era Miembro de Honor de la Academia. Irreparable", relató Rodríguez Villar.

Nacido el 30 de septiembre de 1925, “Falucho” fue autor de numerosas obras de historia, ficción, ensayos y hasta musicales. Entre los más de 20 títulos se destacaron Yrigoyen (1954), Soy Roca (1989), además de El 45 (1968) y Perón y su tiempo, dividido en tres volúmenes: La Argentina era una fiesta (1984); La comunidad organizada (1985); El Régimen exhausto (1986).

Casado con Felisa de la Fuente, con quien tuvo tres hijas, destacó en la música, donde quizá su más recordada creación sea, junto a Ariel Ramírez, la célebre canción Alfonsina y el mar, en homenaje a Alfonsina Storni.

Junto con su prolífera carrera como escritor, Luna se dedicó a difundir su profesión fuera de los claustros académicos. Para eso, en 1967 fundó la revista Todo es Historia, que dirigió hasta último momento.

En ese sentido se refirió su colega Mario “Pacho” O´Donnell, quien manifestó su pesar y destacó que "Félix Luna fue un hombre sabio que comprendió que la historia no era propiedad de los historiadores sino de la gente común. Fue un gran divulgador, el mejor de todos, y nos enseñó a argentinas y argentinos a amar y comprender a nuestra Patria y sus próceres", recordó el escritor.

Miembro de la Academia Nacional de Historia, Luna recibió importantes y diversos premios. La fundación Konex le entregó el Platino en 1994: Biografías y Memorias, el Premio Konex en 1985: Autor de Folclore y el Premio Konex 1984 en Historia.

Otras distinciones fueron al Mejor cuento costumbrista, entregado por la Dirección de Cultura de la Nación por La fusilación (1957); Premio del Instituto de la Opinión Pública por El 45; Segundo Premio de la Municipalidad de Buenos Aires por Los Caudillos (1970) y el Premio Provincias Unidas de la Universidad Nacional de Córdoba (1983), entre otras.

Desde el Estado fue reconocido por su trabajo en el ámbito de la cultura. Así, la Ciudad de Buenos Aires lo nombró Ciudadano Ilustre en 1996, Comendador de la orden del Mérito de Francia (1988); Orden de Cruzeiro do Sul de la Embajada de Brasil (1998); y la Orden de Bernardo O`Higgins, Chile (2000), entre otros.

Polémico con sus declaraciones y exposiciones mediáticas, Luna fue colaborador de la prensa escrita, la radio y la televisión. Para el diario Clarín escribió de 1964 a 1973, y luego participó innumerables veces en Canal 13, Canal 11 y ATC.

También tuvo distintos pasos por la función pública. Entre las intendencias de Julio César Saguier y Facundo Suárez Lastra, ocupó el cargo de secretario de Cultura de la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires; de 1986 hasta 1989.

Antes había sido director de la Obra Social del Ministerio de Trabajo de la Nación (1956 - 1958); consejero de la Embajada de Berna y Montevideo (1958 - 1962); jefe del Gabinete de Relaciones Exteriores y Culto (1962).

En el ámbito de la docencia se desempeñó como profesor de Historia de las Instituciones en la Facultad de Derecho de la UBA (1963-1976), de Historia Argentina Contemporánea en la Facultad de Humanidades de la Universidad de Belgrano (1967-1986); que lo nombró Doctor Honoris Causa en 2003; y como titular de Historia Argentina en la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad del Salvador en 1977.

Fuente: diario Crítica Digital.

P.D: Es el polo "opuesto" a Felipe Pigna creo. Nunca lo leí, pero me han dicho que es muy buen historiador. Y con la trayectoria descripta acá arriba sobra, no? Saludos

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